Cumplido el medio siglo del último golpe de Estado en Uruguay (1973), el dilatado período de existencia de la crisis institucional que lo motivó sigue siendo una veta básica de la historiografía contemporánea. Tres décadas signadas por la aparición de la sedición, el gobierno cívico militar y una larga transición democrática caracterizada por la exacerbada politización analítica de todo el proceso. La perspectiva unívoca de la investigación académica, que ubica a la sedición y a las Fuerzas Armadas corno actores determinantes del conflicto, produce sesgos y exclusiones en el proceso de identificar y evaluar la participación de otros factores que han promovido el ejercicio de la violencia de Estado.
El objetivo de este trabajo es focalizar en cinco análisis específicos realizados por cinco autores en el campo de su especialidad. brindandole al lector herramientas cognitivas, políticas, éticas y estéticas para hacer frente al monopolio intelectual y moral del relato hegemónico.
Federico Leicht
Páginas: 140