Probablemente recuerdes las bromas pesadas con que te molestaban de niño, o a ese compañero que te hacía la vida imposible; incluso puede que tú le hayas arruinado sistemáticamente los recreos a alguien. Probablemente estés asediado por un compañero de trabajo que te hostiga y te ha quitado las ganas, convirtiendo tu día en un infierno, ante la mirada impávida del entorno.
Hay una posibilidad en cinco de que tu hijo esté siendo acosado o esté participando directa o indirectamente del hostigamiento a un compañero. Y es casi seguro que en tu área de trabajo estés presenciando alguna forma de maltrato psicológico.
El bullying - o acoso en los centros de estudio - y el mobbing - o acoso laboral - han existido siempre, pero ahora se miden sus graves consecuencias en la psiquis y en la salud en general, y están alcanzando nuevas formas más crudas y sutiles. Ambos están emparentados porque comparten la misma dinámica y porque un chico acosador conduce a un adulto acosador.
Las secuelas pueden ser a corto o largo plazo, llegando a causar estrés postraumático y derivar en patologías graves como depresión y pánico, y terminar en suicidio. No obstante, desde la psicología se afirma que hay salida y que es posible cortar con esta espiral de violencia.
Este libro te ayudará a reconocer esas situaciones y a actuar. Ya sea porque eres víctima, o porque - quizás sin darte cuenta - eres cómplice de ese juego perverso. También es una herramienta para instituciones educativas y responsables de las organizaciones laborales que bregan por un clima de convivencia saludable y constructivo.
