Un niño descubre que su abuela guarda un secreto muy especial: habla con las plantas de su jardín como si fueran parte de la familia. Entre sueños y vigilias, el protagonista se adentra en un mundo donde la naturaleza cobra vida, y aprende que cuidar, escuchar y dar amor puede transformar lo invisible en algo tangible.
Con una prosa delicada de Alejandro Ferreiro y las ilustraciones llenas de ternura de Levedad, esta historia combina la magia de lo cotidiano con la complicidad entre generaciones, invitando a grandes y chicos a mirar las flores y los vínculos familiares con nuevos ojos
Págnas: 40


