Parece poco productivo tratar de encasillar un texto cuando sus palabras están en fuga, dirigiéndose hacia algún lugar en el que el lenguaje es obsoleto.
«En el medio de la pandemia, en 2020, un comienzo. Diversas búsquedas. Una, la primera, quizás la más importante, alrededor del lenguaje. ¿Con qué palabras se nombra el silencio? Los fragmentos de diario de una mujer que se pregunta cuáles son las formas de vivir en ciudad, en ruido, en estímulo constante, en violencia acústica imposible de parar. Otra, alrededor de un movimiento, un cambio, una mudanza. Buscar el mar, que parece poderlo todo. Abandonar la urbe para salvar lo que queda de esa persona que no nombra, pero sabe, desea, quiere. Un nuevo territorio que exige una nueva forma de vivir.» Tamara Silva Bernaschina